viernes, 6 de abril de 2012

Comprensión

Y al verte jugar, lo comprendí todo.

Aquélla extraña fuerza, invisible, imparable que nos mantiene unidos,
aquél potente vínculo que nos convierte en un solo ser;
el ciclo de transformar oxígeno en CO2, y en el entretanto vivir:
pasear, moverse, correr, gritar, reír, llorar, todo de pronto tuvo sentido.

Fui testigo de tu arrojo, del producto de tu determinación,
comprendí en el acto todas tus cualidades, tus defectos,
que al final han satisfecho todos mis anhelos, todos mis sueños.
Que hacen de ti la mujer más maravillosa que ha visto la Creación

¿Quién me habría visto a mi, de entre todas las personas,
 jugando un partido? ¿quién me habría visto a mi
 corriendo de arriba abajo, rebozando inspiración?

Comprendí -casi sin querer- que tener una pareja es más
 que sólo el título, más que solo el abrazo,
más que el beso, más que el instante de gozo.
Comprendí que amar es entregarlo todo en un segundo
y ganar, al siguiente, el mundo: todo un acto de magia.

Es vivir: pasear, moverse, correr, gritar, reír, llorar,
y en todo ello tenerte siempre, para todo, en mi.
Ser tu mi complemento, ser yo tu voluntad,
y en todo nuestro actuar, celebrar nuestro ritual.

______________________________________________
Al verte jugando, entendí de pronto: estar juntos, ser pareja, es mucho más de lo que asoma esa idea:
es ser pacientes amigos, tranquilos confidentes, ávidos alumnos uno del otro, insaciables amantes, incansables compañeros. Un equipo invencible.

Me dí de bruces con el descubrimiento de que amarte es no sólo decirlo, no sólo hacerlo: amarte es vivir mi vida, seguir mis impulsos, tomar decisiones, y siempre, en cada acción, mantenerte presente,  de manera implícita en cada respiración.

Entendí que toda una vida a tu lado me seguirá pareciendo poco tiempo.

En pocas palabras:

Te amo:
Con cada fibra de mi cuerpo
Con cada pensamiento, cada acción.
con cada célula, cada músculo,
con cada concepto, cada cálculo:
Te amo con todo lo que soy